Llegó Abril que literalmente trae una secuencia de eventos astronómicos que se prolongan en un ciclo de seis años en dos etapas; 2014-2016 y 2017-2020. El primer ciclo 2014-2017 funge como la caída de la mentira, la desintegración de la ilegalidad poder y modelo económico, el segundo 2017-2020 el giro correcto de la rueda como proyección a mediano y largo plazo de los cimientos del nuevo horizonte de sucesos, como lentas aspas que mueven el Gran Molino de la Historia.
Son estos eventos celestiales la natural rotación y traslación de los cuerpos celestes en períodos de espacio tiempo distinto al tiempo terrestre, lo que para nosotros significa un año de 12 meses, en el espacio interestelar son fracciones de segundo. Un año galáctico corresponde al período que tarda el Sistema Solar en dar una vuelta al Centro de nuestra Galaxia Vía Láctea que se estima es de aproximadamente 225 millones de años terrestres. En cada ciclo completo de este recorrido se han producido en la Tierra importantes cambios geológicos que han determinado el fin de una era y el inicio de otra, cuyos marcadores son precisamente cambios significativos en sus cuatro elementos; fuego, aire, tierra y agua, entendido como volcanes, placas tectónicas, océanos, la Vida y evolución de las especies.
Para comprender el cambio de las manecillas de este reloj cósmico, es necesario ir atrás en la historia, revisar las alineaciones planetarias precedentes y evaluar los cambios significativos en períodos históricos de profunda transformación social y geológicos.
El 28 de mayo de 2000 una importante conjunción Júpiter y Saturno a 22º de Tauro preveía una renovación y re-definición de proyectos a largo plazo, estos dos planetas representan los grandes Cronocratores o los regentes del tiempo. Los ciclos de esta conjunción Júpiter y Saturno se producen cada 20 años y son detonantes de la historia de cualquier nación. Simbolizan los grandes pilares de una antigua teoría que proclama que la historia evoluciona en ciclos. De una conjunción a otra Saturno avanza un poco más de 240º quedándose en un mismo elemento por 240 años. Para que transite los cuatro elementos (agua, fuego, tierra, aire) pasan 960 años o su equivalente a un milenio.
El período de 1424-1644 la conjunción hizo su recorrido por Agua, la reforma Luterana dividió al mundo católico entre cristianos y protestantes. Constituye una época de terror religioso marcada por el transito de Saturno en Escorpión.
Entre 1633-1822 el aspecto planetario cambia a Fuego, fue la época de grandes filósofos como Russeau, Descartes y Newton. En 1824 se da la conjunción en Tierra, iniciando una nueva época donde el hombre trató de dominar el mundo material. La explotación sistemática de recursos y un sinnúmero de teorías políticas, y económicas.
En mayo del año 2000 presenciamos la última conjunción en el elemento Tierra, concentrado en la simbología de Tauro; economía, finanzas, ecología y distribución de los recursos de la Tierra. Su actor principal el petróleo y todos sus derivados, alianzas de poder y corrupción a niveles jamás imaginados.
En el 2020 tendremos la conjunción Júpiter Saturno en Aire, por lo que estamos presenciando la transición del elemento Tierra al Aire, o la muerte de los principios materialistas que han dominado a la Humanidad desde la mitad del siglo XVIII hasta nuestra actualidad.
Este nuevo ciclo en Aire prepondera la Consciencia hacia nuevos retos, campos y evolución. En Aire su principal protagonista es la exploración de los enormes poderes de la mente, la expansión del Talento y su proyección al espacio interestelar, el re-encuentro con la Comunidad Galáctica en la mayor trascendencia de la Vida Terrestre, en todas sus formas y especies. La conjunción Júpiter y Saturno será exacta el 21 de diciembre de 2020 a los 0º de Acuario.
En 2002, otra conjunción importante Luna y Saturno en Géminis con su carácter doble y complejo, nos alertaba de un panorama sombrío en efervescencia. A pesar de la caída de la URSS en 1991, la guerra fría dejaba sentir aun sus secuelas en un mundo bipolar de fuerzas antagónicas. La polarización domina los espacios internacionales, y en Venezuela se profundiza aun más. El miedo colectivo a una guerra nuclear parecía estar moviendo los cimientos de la sociedad del siglo XXI. Otros países asumieron el control financiero de lo que había dejado atrás la URSS, el flagelo de modelos totalitarios se dejaba colar entonces en organismos internacionales que existen para la Paz y Libertad.
Es el petróleo y lo económico lo que detenta el poder que deja a los pueblos en un superfluo sueño y en la más estrangulada etapa de la libertad del hombre. El Solsticio de 1991 tras 11 años necesitaba de 11 años más para ver la Primavera, por lo que en 2002 inició la transición de las esporas que aun quedan en el ambiente del Castro-Comunismo, chavismo, y modelos totalitarios disfrazados de democracia.
En este proceso cósmico extraordinario, llegamos al mes de Abril con una conjunción exacta Sol-Urano en Aries a la que se opuso Marte en Libra y en movimiento retrógrado, evento que ocurrió la madrugada del 3/4. Como portador de Justicia Divina, avanza en silencio, entre sombras, emerge de lo profundo del inconsciente colectivo como detonador de estrategias y cambio de planes. Marte en elemento Aire se funde con la lluvia de meteoritos, el plasma del Sol que baña nuestra atmósfera en una sucesión de importantes llamaradas solares de la presente semana. Tiempos de Revelación bíblica, de despertar del talento, de un amanecer estruendoso donde se combina el Ver y Escuchar para deshojar las mentiras, blanco directo de su acción de transmutación de la energía, su color violeta va directo a la psiquis como efecto de la combinación del Fuego y Aire, todo en el planeta esta siendo literalmente bombardeado desde el espacio por esta lluvia cósmica.
La llama violeta es el fuego sagrado del sacerdocio de Melquisedec. Tanto Jesús, Enoc, Elías y Eliseo, así como iniciados en todas las épocas, han utilizado la alquimia de esta llama para llevar a cabo curaciones, milagros, profecías y juicios que eran los signos de su venida.
La saturación de sus auras con la llama violeta fue y es el medio por el cual los avatares han conseguido equilibrio del karma mundial. Por medio de la amplificación de la llama violeta a través del chacra de la sede del alma, ellos se han dedicado a la transmutación planetaria de la oscuridad con la luz y han sobrevivido como pilares de fuego en medio del peso planetario de la oscuridad.
La conjunción Sol-Urano y oposición de Marte potencia la T Cuadrada de Urano-Plutón-Júpiter su energía es trasmutación, la llama violeta que apunta su flecha a la Tierra. Un proceso de trasmutación para la Humanidad que será clave para la primera etapa del ciclo de 6 años; el bienio 2014-15.
La América del Sur tiene un importante legado energético por su posición geográfica y sus recursos, en especial la Cordillera de los Andes que como doble dorsal vertebral se impone desde la Patagonia hasta Venezuela. Cuenta con puntos energéticos en todo su recorrido que como chakras conectados al centro del planeta, reverenciados por las antiguas culturas que poblaron la América desde tiempos inmemoriales. El aspecto de la cordillera asemeja a una serpiente en movimiento, esta energía se traslada por la Tierra al igual que lo hace por el cuerpo de todas las especies que habitan la Tierra. La Consciencia planetaria cambia el curso de esta energía cada 13 mil años, en que la polaridad de la Kundalini cambia al polo opuesto y simultáneamente lo hace a nivel geográfico. El suceso tiene relación con un proceso propio de la Tierra, un bamboleo sobre su eje conocido como Preseción de los Equinoccios. El bamboleo cíclico del globo terrestre sobre la inclinación de su eje, describe un círculo imaginario en la Bóveda Celeste, tanto en el Hemisferio Norte como en el Hemisferio Sur.
Desde los antiguos sumerios y otras culturas, conocían que este proceso dura aproximadamente 25920 años, completándose este círculo imaginario en la Bóveda Celeste cuando se cierra sobre la Constelación de Acuario, tras haber recorrido las 12 constelaciones.
La Kundalini de la Tierra tuvo su hogar en la antigua Lemuria y en los últimos 13 mil años que marca el desarrollo espiritual reposaba en la Atlántida. En los últimos 2000 años pasó por el Tibet marcando ese lugar del planeta como polo de desarrollo espiritual del Oriente. Posteriormente tras pasar por la India arribó a la Cordillera de los Andes en 2002.
El polo Norte del planeta intercepta a la esfera celeste en un punto cercano a la Estrella Polaris. La energía de esta estrella se derrama sobre la Tierra en forma paralela al eje de la misma, a través de los Meridianos del globo terrestre. En este momento el que concentra la mayor recepción de esta energía es el Hemisferio Sur, a todo lo largo de la Cordillera de los Andes. De acuerdo con cálculos de investigadores interesados en esta temática, el centro de recepción se encontraría al sur de Perú en las altas mesetas de la Cordillera, como epicentro de estas energías telúricas. La pineal de esta gran serpiente de luz, esta ubicada al norte justo sobre Venezuela, específicamente en los estados andinos; Táchira, Mérida, Trujillo, Alto Apure y Barinas. Mérida constituye el corazón con las mayores elevaciones montañosas a más de 4000 metros sobre el nivel del mar. La región de los Andes en Venezuela es la de mayor amplitud climática y variedad geográfica del país, una prolongación de los Andes Colombianos que al llegar al nudo de Pamplona se bifurca en dos cadenas; Sierra de Perijá y la Cordillera de Mérida. La separación de la Cordillera Colombiana y la de Mérida tiene su punto en la depresión del Táchira. Una larga hendidura tectónica divide a los andes en dos bloques paralelos; la sierra del norte o la culata y la sierra de Mérida en esta se encuentran los dos picos más altos del país; Pico Humboldt y Pico Bolívar. La región posee salida al mar por el Lago de Maracaibo, y se regenera con el poderoso Relámpago del Catatumbo.
Las circunstancias geográficas de la pineal de Venezuela en la Cordillera de los Andes no son "casuales" sino "causales" hay una sincronización energética poderosa que otorga a los estados andino y al Zulia una característica natural de la llama violeta, de tal manera que el electro telurismo de la Tierra (el cual cambia en cada Era), la inclinación de nuestro planeta, la emanación geodésica, las perturbaciones del sistema, la proyección de nuestra galaxia en el espacio, y un conjunto de otros muchos factores, condicionan el contacto de la Cordillera y su salida al Mar Caribe como el punto geográfico que funge como cabeza o pineal energético por excelencia. América del Sur es el epicentro del gran cambio de Era y esta energía de la Tierra se desplaza desde la Patagonia hasta Venezuela. Ya en Venezuela se está operando un extraordinario cambio si recordamos que fue precisamente en Táchira donde el 5 de febrero 2014 iniciaba la tensión que ya se extiende a 60 días continuos de Resistencia y Barricada. Han sido los estados andinos y el Zulia donde se ha concentrado la mayor resistencia al régimen castro chavista, y ha sido la mecha para contagiar al resto del país. No existe en la energía una clasificación del bien o el mal, la polaridad se expresa en Luz y Oscuridad y ambos procesos son necesarios para Trascender. En este momento hay un cambio planetario, y del Sistema Solar de la polaridad, vamos de Oscuridad a la Luz como un proceso de aprendizaje y evolución. El epicentro de este cambio de polaridad es precisamente la América del Sur y cada país tiene un componente energético que se combina en la total dimensión de este cambio sin precedentes para la Humanidad. No se quedará solo en América, se irá extendiendo a todo el planeta ya que es una era con dos mil años por delante, y ahora solo es el Inicio de la magia creadora del Cosmos. Por eso el axioma "como es arriba es abajo", transitamos la alquimia de Generación propio de las Leyes Universales que rigen los cambios de Era.
Mi abrazo a todos los Estudiantes venezolanos, héroes anónimos del despertar del bravo pueblo de Venezuela. Honor a los caídos en Tierra de Gracia y mi SOS VENEZUELA!!!
Nos re-encontramos pronto, a través de una nueva publicación dedicada al Nacimiento de la Libertad en Venezuela y su conexión cósmica con el planeta.
La América del Sur tiene un importante legado energético por su posición geográfica y sus recursos, en especial la Cordillera de los Andes que como doble dorsal vertebral se impone desde la Patagonia hasta Venezuela. Cuenta con puntos energéticos en todo su recorrido que como chakras conectados al centro del planeta, reverenciados por las antiguas culturas que poblaron la América desde tiempos inmemoriales. El aspecto de la cordillera asemeja a una serpiente en movimiento, esta energía se traslada por la Tierra al igual que lo hace por el cuerpo de todas las especies que habitan la Tierra. La Consciencia planetaria cambia el curso de esta energía cada 13 mil años, en que la polaridad de la Kundalini cambia al polo opuesto y simultáneamente lo hace a nivel geográfico. El suceso tiene relación con un proceso propio de la Tierra, un bamboleo sobre su eje conocido como Preseción de los Equinoccios. El bamboleo cíclico del globo terrestre sobre la inclinación de su eje, describe un círculo imaginario en la Bóveda Celeste, tanto en el Hemisferio Norte como en el Hemisferio Sur.
Desde los antiguos sumerios y otras culturas, conocían que este proceso dura aproximadamente 25920 años, completándose este círculo imaginario en la Bóveda Celeste cuando se cierra sobre la Constelación de Acuario, tras haber recorrido las 12 constelaciones.
La Kundalini de la Tierra tuvo su hogar en la antigua Lemuria y en los últimos 13 mil años que marca el desarrollo espiritual reposaba en la Atlántida. En los últimos 2000 años pasó por el Tibet marcando ese lugar del planeta como polo de desarrollo espiritual del Oriente. Posteriormente tras pasar por la India arribó a la Cordillera de los Andes en 2002.
El polo Norte del planeta intercepta a la esfera celeste en un punto cercano a la Estrella Polaris. La energía de esta estrella se derrama sobre la Tierra en forma paralela al eje de la misma, a través de los Meridianos del globo terrestre. En este momento el que concentra la mayor recepción de esta energía es el Hemisferio Sur, a todo lo largo de la Cordillera de los Andes. De acuerdo con cálculos de investigadores interesados en esta temática, el centro de recepción se encontraría al sur de Perú en las altas mesetas de la Cordillera, como epicentro de estas energías telúricas. La pineal de esta gran serpiente de luz, esta ubicada al norte justo sobre Venezuela, específicamente en los estados andinos; Táchira, Mérida, Trujillo, Alto Apure y Barinas. Mérida constituye el corazón con las mayores elevaciones montañosas a más de 4000 metros sobre el nivel del mar. La región de los Andes en Venezuela es la de mayor amplitud climática y variedad geográfica del país, una prolongación de los Andes Colombianos que al llegar al nudo de Pamplona se bifurca en dos cadenas; Sierra de Perijá y la Cordillera de Mérida. La separación de la Cordillera Colombiana y la de Mérida tiene su punto en la depresión del Táchira. Una larga hendidura tectónica divide a los andes en dos bloques paralelos; la sierra del norte o la culata y la sierra de Mérida en esta se encuentran los dos picos más altos del país; Pico Humboldt y Pico Bolívar. La región posee salida al mar por el Lago de Maracaibo, y se regenera con el poderoso Relámpago del Catatumbo.
Las circunstancias geográficas de la pineal de Venezuela en la Cordillera de los Andes no son "casuales" sino "causales" hay una sincronización energética poderosa que otorga a los estados andino y al Zulia una característica natural de la llama violeta, de tal manera que el electro telurismo de la Tierra (el cual cambia en cada Era), la inclinación de nuestro planeta, la emanación geodésica, las perturbaciones del sistema, la proyección de nuestra galaxia en el espacio, y un conjunto de otros muchos factores, condicionan el contacto de la Cordillera y su salida al Mar Caribe como el punto geográfico que funge como cabeza o pineal energético por excelencia. América del Sur es el epicentro del gran cambio de Era y esta energía de la Tierra se desplaza desde la Patagonia hasta Venezuela. Ya en Venezuela se está operando un extraordinario cambio si recordamos que fue precisamente en Táchira donde el 5 de febrero 2014 iniciaba la tensión que ya se extiende a 60 días continuos de Resistencia y Barricada. Han sido los estados andinos y el Zulia donde se ha concentrado la mayor resistencia al régimen castro chavista, y ha sido la mecha para contagiar al resto del país. No existe en la energía una clasificación del bien o el mal, la polaridad se expresa en Luz y Oscuridad y ambos procesos son necesarios para Trascender. En este momento hay un cambio planetario, y del Sistema Solar de la polaridad, vamos de Oscuridad a la Luz como un proceso de aprendizaje y evolución. El epicentro de este cambio de polaridad es precisamente la América del Sur y cada país tiene un componente energético que se combina en la total dimensión de este cambio sin precedentes para la Humanidad. No se quedará solo en América, se irá extendiendo a todo el planeta ya que es una era con dos mil años por delante, y ahora solo es el Inicio de la magia creadora del Cosmos. Por eso el axioma "como es arriba es abajo", transitamos la alquimia de Generación propio de las Leyes Universales que rigen los cambios de Era.
Mi abrazo a todos los Estudiantes venezolanos, héroes anónimos del despertar del bravo pueblo de Venezuela. Honor a los caídos en Tierra de Gracia y mi SOS VENEZUELA!!!
Nos re-encontramos pronto, a través de una nueva publicación dedicada al Nacimiento de la Libertad en Venezuela y su conexión cósmica con el planeta.
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