domingo, 22 de mayo de 2011

El despertar de la conciencia y la Noosfera

El despertar de la conciencia es un término al cual se hace referencia en este siglo XXI con particular importancia. Decía en el artículo de la semana pasada, que las manifestaciones en el Medio Oriente, África y ahora en España, son elementos a tener en cuenta cuando analizamos este fenómeno humano denominado "despertar de la conciencia". Precisamente, en el siglo XX, Jules le Roi un filósofo francés y estudiante de Henri Bergson quien ganó el Premio Nobel de Literatura en 1927, dió vida al término Noosfera, literalmente significa la esfera de la mente, más específicamente la capa mental que envuelve al planeta tierra.

Teilhard de Chardín en su visión del hombre se basaba, entre otras, en la Ley de la Complejidad para explicar el desarrollo y la evolución de la vida. Teilhard observó como en la evolución los seres han ido integrándose en unidades superiores. Estas transformaciones han ido ascendiendo a formas más perfectas, más organizadas. En la evolución del hombre Teilhard hablaba primero de población de la tierra por los pre-homínidos, después la civilización, donde encontramos una gran heterogeneidad de culturas y caracteres. Donde pronto emergen varios focos de cultura. Con esto, entre el hombre y todo lo que le precedió, existe un cambio de estado, una ruptura. Desde la aparición del Homo-Sapiens, apenas hemos observado una mayor cefalización. El cerebro parece haber llegado a un volumen no susceptible de aumento. Sin embargo, las conexiones en la sociedad, ya económicas, ya físicas, ya afectivas, han facilitado todo el progreso cultural. De Chardin observa en la evolución contemporánea un particular aumento de la socialización, entendida como multiplicación progresiva de las relaciones sociales. Siguiendo la Ley de la Complejidad, ¿no parece lógica la integración de personas en un ser social, en una sociedad personal? "Desde sus orígenes hasta nuestros días, la Humanidad... ha pasado un periodo de establecimiento geográfico, en el curso del cual se trataba para ella, en primer lugar, de multiplicarse y de ocupar la Tierra. Y sólo muy últimamente.. han aparecido en el mundo los primeros síntomas de un repliegue definitivo y global de la masa pensante en el interior de un hemisferio superior, en el que sólo podrá irse contrayendo y concentrando por efectos del tiempo."

Esta parte del mundo vivo que es creada por el pensamiento y la cultura del hombre es lo que Tielhard denominó la noosfera. Lotman acuñó el concepto de semiosfera para referirse a esa atmósfera significativa en la que la cultura fluye a lo largo del tiempo. Para Vázquez Medel, la semiosfera de Lotman está "sujeta a procesos azarosos, caóticos, impredecibles... A turbulencias, atractores extraños y concatenaciones que van más allá de los procesos lineales de causalidad inmediata, al modo de los "efectos mariposa".


El "efecto mariposa" es un concepto que hace referencia a la noción de sensibilidad a las condiciones iniciales dentro del marco de la teoría del caos. La idea es que, dadas unas condiciones iniciales de un determinado sistema caótico, la más mínima variación en ellas puede provocar que el sistema evolucione en formas completamente diferentes. Sucediendo así que, una pequeña perturbación inicial, mediante un proceso de amplificación, podrá generar un efecto considerablemente grande. Tal y como ocurre en este momento en diferentes Estados-Nación del planeta, se evidencia un discurso agotado, unas estructuras socio-políticas en decadencia, y necesidades de la población que no han sido consideradas por los políticos de turno.

Un ejemplo claro sobre el efecto mariposa es soltar una pelota justo sobre la arista del tejado de una casa varias veces; pequeñas desviaciones en la posición inicial pueden hacer que la pelota caiga por uno de los lados del tejado o por el otro, conduciendo a trayectorias de caída y posiciones de reposo final completamente diferentes. Cambios minúsculos que conducen a resultados totalmente divergentes.

Su nombre proviene de las frases: "el aleteo de las alas de una mariposa se puede sentir al otro lado del mundo" (proverbio chino) o "el aleteo de las alas de una mariposa pueden provocar un Tsunami al otro lado del mundo" así como también "El simple aleteo de una mariposa puede cambiar el mundo".


El mundo evidentemente esta en proceso de transición, y el ser humano esta concientemente participando de este cambio. La Noosfera de Teilhard de Chardin ya a principios del siglo pasado evidenciaba estos cambios, y habla incluso de un Punto Omega. Fue un religioso, paleontólogo y filósofo francés que aportó una muy personal y original visión de la evolución. Miembro de la orden jesuita, su concepción de la evolución, considerada ortogenista y finalista, equidistante en la pugna entre la ortodoxia religiosa y científica, propició que fuese atacado por la una e ignorado por la otra. Suyos son los conceptos Noosfera (que toma prestado de Vernadsky) y Punto Omega.Su teoría se centra en cuatro puntos fundamentales:

El tiempo: la cuarta dimensión

Antes de la aparición de la teoría de la evolución, predominaba la imagen de un universo estático, formado totalmente desde sus lejanos comienzos. Por el contrario, con la evolución aparece la dimensión “tiempo”, como un actor principal, ya que el cambio es lo esencial y lo estático es lo inexistente.

La evolución universal

Según Teilhard, no sólo la vida, sino la materia y el pensamiento están también involucrados en el proceso de la evolución. De ahí que es necesario atribuirle a dicho proceso un sentido.

Principio de complejidad-conciencia

El sentido de la evolución, que involucra tanto la materia, como la vida y el pensamiento (o el espíritu), está comprendido en un principio descriptivo de la mayor generalidad: la tendencia hacia el logro de mayores niveles de complejidad y, simultáneamente, al logro de mayores niveles de conciencia.

Punto Omega: la meta de la evolución

A partir de la tendencia del universo, guiado por la Ley de complejidad-conciencia, Teilhard vislumbra el Punto Omega, al que define como “una colectividad armonizada de conciencias, que equivale a una especie de superconciencia. La Tierra cubriéndose no sólo de granos de pensamiento, contándose por miríadas, sino envolviéndose de una sola envoltura pensante hasta no formar precisamente más que un solo y amplio grano de pensamiento, a escala sideral. La pluralidad de las reflexiones individuales agrupándose y reforzándose en el acto de una sola reflexión unánime”.

La evolución entonces se estaría convirtiendo en un proceso cada vez más opcional. Teilhard señala así los problemas sociales del aislamiento y de la marginalización como inhibidores enormes de la evolución, ya que la evolución requiere una unificación del sentido. Ningún futuro evolutivo aguarda a la persona si no es en asociación con los demás.


La complejidad descrita por de Chardin, señala que a medida que la materia se va enfriando, luego del momento inicial del universo y posterior expansión, se establece un progresivo aumento de la complejidad, que va desde las partículas fundamentales hasta los núcleos, átomos y moléculas. Si bien no existe una definición exacta de lo que es la complejidad, al menos aceptada con generalidad, podemos asociarla al grado de información necesaria para describir algún ente natural, o artificial. La información está descrita cuantitativamente a partir de la teoría de la información.

En relación a la conciencia, a partir de las moléculas de mayor tamaño y complejidad, aparece la vida y comienza a actuar la selección natural. A medida que crece la complejidad va apareciendo cierto grado de autoconciencia. La última etapa de este proceso nos lleva hacia la vida inteligente, el último peldaño de la complejidad y de la conciencia que tenemos de nosotros mismos. (Consciente: que siente, piensa, quiere y obra con conocimiento de lo que hace).

La ley de complejidad-conciencia: Respecto de este principio, Teilhard de Chardin escribe: “Abandonada a sí misma largo tiempo, bajo el juego prolongado de las probabilidades, la Materia manifiesta la propiedad de ordenarse en agrupamientos cada vez más complejos y, al mismo tiempo, cada vez más impregnados de conciencia; este doble movimiento conjugado de enrollamiento cósmico y de interiorización (o centración) psíquica prosigue, acelerándose y avanzando todo lo lejos que es posible, una vez iniciado”.

“Esta deriva de complejidad-conciencia (que desemboca en la formación de corpúsculos cada vez más complicados) es fácilmente reconocible desde lo atómico y se afirma en lo molecular. Pero es, evidentemente, en lo viviente donde se descubre con toda su claridad, y toda su aditividad; al mismo tiempo que se transpone en una forma cómoda y simplificada: la deriva de cerebración”.

“En la perfección y la cefalización crecientes de los sistemas nerviosos, tenemos, auténticamente, según parece, un parámetro concreto y preciso que permite seguir, a través de la jungla de las formas vivientes, la variación absoluta y útil de la corpuscularidad cósmica”.

El pensamiento de Teilhard de Chardin cobra vigencia en el siglo XXI, precisamente con el avance de las tecnologías, un gran cerebro mundial que se manifiesta en la Internet agrupa a seres humanos sin importar las distancias, las redes sociales invitan a expresar emociones, sentimientos encontrados que de otra forma no afloran a la luz. Una nueva transformación planetaria esta en curso, quizás la Noosfera de Teilhard de Chardin y su Punto Omega están en pleno proceso, aun no comprendemos la magnitud de los cambios, o las condiciones que están reforzando estas multitudinarias manifestaciones de la conciencia colectiva. Son pensamientos que viajan en la red y que son captados por miles de personas que aun no estando fisicamente, son capaces de compartir desde el palno emocional dichos eventos. El despertar de la conciencia no es solo de los seres humanos, pues como ya hemos escrito aquí, la conciencia es una forma de manifestación del Universo, de los planetas y de todas las formas con vida en el cosmos. Ciclos que se cumplen, etapas que se superan, momentos de evolución cuántica vivimos en este plano y captamos del Universo. No estamos solos en este despertar de la conciencia. De este tema continuaré escribiendo la próxima semana. Saludos a todos los que topen con este portal en el espacio cuántico de la Internet!!!

1 comentario:

  1. En el proceso de interiorización posterior a la cefalización ya podemos vislumbrar las bases físicas del proceso en las 7 dimensiones adicionales de compactificación a donde apunta los modelos de supercuerdas.
    http://orca-cuantico.blogspot.com/2011/07/scratch-proyecto-motorplasmawarp.html

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